Vínculos entre Brasilia y Egipto, Enigma Faraónico

"En el hemisferio sur, entre los paralelos 15 y 20, alrededor de un lago, veo una gran civilización que surje. La miel y la leche fluye desde su centro, y el oro se esconde debajo de su tierra."

Juan Bosco fue canonizado más tarde, y sus visiones se mantuvieron a salvo. Ochenta años después de su visión, el presidente de Brasil tomó una decisión que determinaría el futuro del país: la nueva capital de Brasil se debe mover a la mitad de la nada, en el corazón de Brasil, alrededor del paralelo 16.

En la década de 1930, Juscelino Kubitschek era sólo un estudiante que visita Egipto. Visitó el templo de Luxor y las ruinas de la ciudad de Tell el-Amarna, el sitio sagrado idealizado por el faraón Akenatón (Amen-Hotep IV) en el año 1500 antes de Cristo, que recibió el nombre de "Ajetatón" - el horizonte del sol.

La arquitectura de Ajetatón fue una reverencia al sol, y el templo principal del faraón fue diseñado para permitir que el sol levantarse todas las mañanas a través de rituales específicos. El sol no era el sol físico que se ve todos los días en el cielo, pero el sol interior que necesita para luchar contra la oscuridad hasta que pueda volver a brillar y reinar en los corazones de la gente.

Treinta años después de la visita de Kubitschek a Egipto, fue elegido presidente de Brasil y tenía un plan, iba a construir una nueva capital en el centro de Brasil.

Lo que mucha gente no supo es que había otra historia detrás de la construcción de Brasilia - Juscelino Kubitschek quería resucitar el sueño de Akhenaton, y construir una ciudad que podría predisponer a sus ciudadanos a estados superiores de conciencia a través de la magnífica arquitectura alineada con la estrellas, siguiendo el ejemplo de Ajetatón.


Con la ayuda de uno de los arquitectos más destacados de todos los tiempos - Oscar Niemeyer - y Lúcio Costa, Kubitschek comenzó su viaje faraónico que culminaría con la construcción de una moderna Ajetatón, considerado por los esoteristas como la capital del conocimiento oculto.

El 21 de abril de 1960, se fundó Brasilia.

La versión pública de la historia es que Brasilia tiene la forma de un avión. De hecho, el área principal de la ciudad está dividida en dos alas, llamado Asa Norte (ala norte) y Asa Sul (ala sur), sino que afirman los que conocen la historia de la construcción de Brasilia en profundidad esa forma de Brasilia no es que de un avión, sino la de un halcón - dios egipcio Horus . También es posible que se refiere a la diosa egipcia Isis, en su pintura famosa con alas.

La arquitectura del Congreso Nacional de Brasil también se esconde un mensaje muy simbólico. Idealizado por Oscar Niemeyer, el edificio cuenta con dos grandes columnas y dos cúpulas-una cóncava y convexa de ser otro ser.

Las dos columnas son similares a los encontrados en el Templo de Luxor en Egipto. Las dos cúpulas representan la salida del sol y la luna reflejando su luz - esto es un importante símbolo de muchas tradiciones místicas, y simbolizan la luz divina y su reflejo en el plano físico. En política, este símbolo ha sido utilizado como una representación del papel del gobernante en una sociedad - que debería ser el sol que ilumina a toda la nación con su sabiduría, haciendo de la ciudad, un reflejo perfecto de lo divino.

El aspecto más fascinante del Congreso Nacional, sin embargo, es el hecho de que se proyectó de tal manera que cada 21 de abril, en el aniversario de la fundación de Brasilia, el sol sale exactamente entre las dos torres, y un rayo magnífico de luz brilla a través de ellos, al anunciar la misión de la ciudad. Brasilia es entonces, la "Fiesta del Sol".